En cualquiera de estos casos, es recomendable visitar a un dermatólogo para que él nos indique qué técnica de depilación es la que más se ajusta a nuestra piel.
A continuación te contamos los métodos de depilación más comunes para que elijas el que más se adapte a ti.
- La primera, más común y hasta el momento más efectiva es la cera. Existen ceras de miel y vegetales y últimamente se han incorporado las de olor a chocolate. El calor de la cera hace que se dilate el poro, extrayendo el bello de raíz, el cual vuelve a salir en un plazo de 2 a 4 semanas.
- Cremas depilatorias. Son muy prácticas ya que las puedes usar en cualquier minuto y llevarlas a todos lados contigo. Sin embargo, muchas veces suelen irritar la piel y además no sacan el pelo de raíz, por lo que el bello vuelve a salir a los pocos días.
- Pinzas depilatorias. Estas son efectivas para algún pelito suelto que podemos tener en la cara. Pero es lento y además corremos el riesgo de cortarlo.
- Electrólisis. Este procedimiento va quemando el folículo del bello, debilitándolo y retardando su crecimiento. Este tratamiento se debe realizar en centros acreditados. Es una técnica que se usa cada vez menos, ya que en algunos casos produce enrojecimiento de la piel y además puede ser algo doloroso.
- El láser. Este procedimiento es muy efectivo, con resultados visibles desde la primera sesión. Existen diferentes tipos de láser, los cuales se utilizan según la tipología de tu pelo: grueso, oscuro, claro, delgado etc. También se debe practicar en lugares especializados y normalmente se requieren entre 6 a 10 sesiones para lograr buenos resultados.