A muchas nos encanta coleccionar distintos productos de maquillaje: nunca tenemos suficientes labiales, sombras, máscaras de pestañas o esmaltes. El problema es que, por lo general, no tenemos dónde guardarlos en nuestra casa o no sabemos cuáles son las formas ideales de conservar cada cosa.
Por eso hablamos con la Interior Planner Marietta Vitale, que nos dio algunos tips para lograr la organización perfecta y aprovechar al máximo cada producto:
1. El primer paso es determinar con qué criterio vamos a querer organizar el maquillaje: por marca, por color, por tipo de producto (todos los labiales juntos, todos los delineadores juntos) o alguna otra categoría que nos sea más conveniente. Es importante pensar en el sistema que más le sirve a cada una: algunas tienen tantos productos que podrían ser maquilladoras, otras se conforman con los tres o cuatro básicos de cada día. Además, hay chicas que se maquillan todos los días y otras, sólo para ocasiones especiales.
2. Lo siguiente es elegir el espacio físico donde los vamos a querer guardar. Lo ideal es mantener los maquillajes en un lugar seco. A pesar de que el baño es una opción que nos queda cómoda, debemos asegurarnos de que haya buena ventilación para que los productos no tengan contacto con la humedad. Además, asegurarnos que estén bien contenidos para que el vapor no los arruine (en cajas, valijitas, neceser, etc). Una opción mejor que el baño, si tenemos lugar, es armar una especie de tocador en alguna mesita o rincón de la casa. Es clave poner un espejo y tener buena iluminación (preferiblemente, también luz natural, o sea estar cerca de una ventana) para poder sentarse tranquila a aplicar los productos.
3. Es importantísimo mantener todos los productos siempre limpios (sobre todo pinceles y esponjas) y bien cerrados para no manchar el resto de las cosas. Una buena idea es guardar toallitas de papel junto a los maquillajes, para tener el hábito de limpiarlos siempre después de usarlos.
4. Para disponer los distintos ítems, lo mejor es guardar todo clasificado en porta cosméticos o recipientes que se puedan cerrar. Pueden ser bolsitos transparentes de distintos tamaños (según los productos), bandejitas o cajitas de acrílico... lo que a cada una se le ocurra y le guste más. El objetivo es poder ver dónde está cada cosa sin tener que abrir cada bolsito. Si tenemos poco lugar de guardado, se pueden usar organizadores transparentes colgantes, para aprovechar el espacio de manera vertical, atrás de una puerta o colgado en el placard.
5. Si dividimos por rubros, las sombras y rubores van por un lado y bases y correctores por el otro. O sea, cremosos por un lado, polvos por el otro. Delineadores y máscaras pueder ir juntos.
6. Está bueno etiquetar los distintos contenedores ("Esmaltes", "sombras", etc) para luego no confundirnos y seguir siempre el mismo criterio de organización. Esto es especialmente útil si no tenemos recipientes transparentes, para saber qué hay adentro de cada cosa.
7. Hay que animarse a reutilizar elementos que nos sirvan para organizar (latas, frascos, tuppers que tengamos sin tapa, ¡todo sirve!). Sólo hace falta ser creativas y diseñar. Por ejemplo, para guardar los pinceles, podemos usar algún recipiente pensado para los cepillos de dientes. O rellenar un frasco transparente con granos de café y usarlo como porta pinceles (todos clavados en forma vertical).
La estructura de un especiero para la cocina puede servir para acomodar los perfumes.
Una idea para guardar las sombras y que queden todas expuestas, es adherirles un imán en la parte de atrás y ponerlas todas en una pizarra de metal. De esta manera, se ven todos los colores y también quedan divertidas para decorar.
8. Intentar que quede todo despejado para ayudar al orden visual. Si tenemos más espacio en cajones, es bueno recordar que "divide y conquistarás". Usando divisiones, siempre es más fácil encontrar lo que estamos buscando. En cambio, si tenemos más espacio en la mesada, hay que buscar elementos que contengan y agrupen los productos en forma vertical (frascos, latas, incluso floreros chicos... ¡lo que sea!).
9. Para los algodones, hisopos o toallitas de papel se pueden usar también tuppersde cocina (transparentes) y ordenados, sin tapa, adentro de los cajones. A estos elementos y los de limpieza de la piel (tipo desmaquillante) es cómodo guardarlos junto a los maquillajes.
10. ¡Dejar los básicos a mano! A los elementos que usamos todas las mañanas (labial, corrector, máscara, etc) hay que guardarlos todos juntos y separados del resto para que sea más fácil encontrarlos en el día a día. Tal vez podemos armar un mini bolsito o necessaire que luego vaya también en cartera y sirva para retoques durante el día.
11. Regalar todos aquellos maquillajes que no hayamos usado en los últimos 6 meses. Además, hay que recordar que todos los productos tienen vencimiento: si no los vamos a usar, tal vez otra persona los puede aprovechar. Y obviamente, ¡hay que tirar todo lo que esté vencido!
12. Un tip para viajes: usar un estuche de anteojos rígido para guardar los maquillajes/pinceles así no se pierden ni se arruinan.
Para terminar, Marietta Vitale nos dio un último consejo: "Cuando las cosas están organizadas, siempre vas a encontrarlas con mayor facilidad. Y acordate que si a un objeto no lo encontrás en menos de 30 segundos, es porque está en el lugar equivocado."