busqueda

Búsqueda personalizada
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

4 pasos para tener senos firmes






El mejor ejercicio para tener senos firmes es la natación, este ejercicio estimula todos los músculos del pecho de manera muy efectiva.

 
Existen otros ejercicios que ayudarán a dar firmeza al busto como: los aeróbicos, correr y hasta bailar.
 
Presta atención a estos cinco tips y verás que podrás mantener tus pechos firmes y reducir la flacidez.
 
 
1. Mantén tu peso estable y cuida tu postura


Subir y bajar de peso repentinamente aumenta la flacidez. Lo más recomendable es que te mantengas en el mismo peso y evites los cambios bruscos de peso. Además, debes de cuidar la postura de la espalda, pues juega un papel importante.
 


2. Evita el agua caliente


El agua caliente hace a la piel más flexible, por lo tanto si tomas duchas prologadas con agua caliente, tu piel se tornará más blanda. Evita las duchas prolongadas con agua caliente
 


3. Un buen brasier es básico


La importancia del brasier es enorme en este tema. Debes usar los que vayan acorde al volumen de tu pecho. No debe  apretarte demasiado, pero debe de aportar un buen soporte.  Lo recomendable es también cuidar que el material del brasier sea algodón, o algún otro tejido que te permita transpirar, para evitar que dañes tu piel.
 


4. Ejercicios en casa


Los ejercicios caseros para tonificar el pecho son una manera sencilla de asegurarte que todos los días haces algo para reducir la flacidez de los senos. Cualquier tipo de ejercicio pectoral será muy efectivo y aportará a la firmeza de tu busto.
 


-Junta las palmas, frente a ti, al nivel del busto y con los codos apuntando hacia el frente haz fuerza presionando una palma contra la otra. Deja de presionar y vuelve a empezar, lo ideal es hacer 30 repeticiones de este simple, pero intenso ejercicio.
 
-Estirar los brazos, como una cruz, y levantar los brazos sosteniendo libros o pesas livianas, y bajarlos despacio. También se puede hacer este mismo ejercicio pero con los brazos estirados hacia el frente. El secreto no está en el peso que levantes, sino en las repeticiones que hagas de este ejercicio. Así que procura poco peso (desde medio kilo hasta un kilo por brazo) y muchas repeticiones.